La única.

Antenoche soñé con la única mujer a la que de verdad he amado (con el perdón de mis ex-pretendientes y ex-novia): Aida, mejor conocida en el bajo mundillo de los amigos de la prepa como “Ardilla”.

Las cosas están así. Aunque yo se que nunca va a pasar nada entre nosotros, hay algo que siempre me hace sentir bien cuando pienso en ella y cuando estoy con ella. Y no digo que la siga amando. Bueno, sí, pero ya solo como amiga. Una amiga muy especial a la que quiero mucho.

Entonces me desperté y en el transcurso de la mañana (de la de ayer) estuve pensando que ya hacía mucho que no nos veíamos, que ya nos hacía falta la ida al cine o la caminata por el centro o por cualquier otro lugar de la ciudad. De repente me llega un mensaje suyo al celular. Que se iba a festejar con los de la prepa (por que cumple años por estas fechas) que iba a hacer comida. Ya me dijo donde y todo, pero pues uno que si trabaja, valió madres, porque cerré un poquito más tarde y el restaurante estaba hasta la verga esquina con la chingada y yo sin bañarme ni nada pues me qué voy a la casa a echarme un chapuzón en la regadera (si es que esto es posible), pero pues ya salí muy tarde y ya no alcanzaba a llegar. Le mando un mensaje diciéndole que mejor se lo cambiaba por una ida al cine en la semana. Es hora que no me responde.

Entonces que me lanzo a casa de “El muerto” porque también cumplió años en las fechas y como a las 6 empezamos a tomar tequilitas, como a las 8 llegó veto y le seguimos con otro par de cubas y nos fuimos a casa de kike donde estuvimos hasta las 5 de la mañana tomando vodka. Y llegando a la casa el respectivo cagadón de parte de mi madre por haber llegado a esas horas, pero es que el vodka no perdona.

Y como esto iba a tratar sobre la única mujer a la que he amado y ya me desvié mucho del tema, mejor los dejo.

Un besote para ellas y un saludo para ellos. El feto les agradece las lecturas de sus andanzas.